Los escritos en sus comienzos

Artículos

Graciela Cristina Benedetti vive en Argentina y organiza grupos de estudio por Zoom con Los escritos de Urantia.

Los escritos en sus comienzos

Gran testimonio de una lectora de
Los escritos de Urantia desde sus inicios en 2012


Me llamo Graciela Cristina Benedetti, vivo en la ciudad de Bahía Blanca, en la provincia de Buenos Aires en Argentina. Estoy casada con Eduardo Iezzi y tenemos tres hijos: Nicolás Eduardo, Sebastián Juan y Leonardo Carlos.

De Graciela Benedetti a Ángel F. Sánchez Escobar:

Ángel, ¿recuerdas? Cuando te conocí, yo escribía con el seudónimo BEN HUR en el Foro de Lectores de Asociación Urantia Internacional. Al mismo tiempo me estaba preparando para ser instructora de UBIS [Urantia Book Internet School] en español. Y tenía que hacer una presentación a la Fundación Urantia para que me conocieran.

El viernes, 6/4/2012 13:33, escribí esta solicitud idéntica a dos personas que en el Foro daban a entender que sabían perfectamente el idioma inglés:

Hola, nos conocimos en los Foros. Pero te escribo por otra razón. Escribí un breve texto en español sobre lo importante que fue para mí conocer el libro de Urantia para presentar a la Fundación Urantia y luego lo traduje al idioma inglés utilizando un traductor de la web. Quisiera que la traducción expresara cabalmente lo que digo, y no sé si esto se logró con el traductor de la web que utilicé, por eso recurro a tus conocimientos para solicitarte corrijas la traducción. ¿Puedes hacerlo? si me dices que sí, te envío el texto. No podré pagarte el favor, pero si podré escribir al pie del escrito al enviarlo a la Fundación, que tú lo has corregido.

Entonces me respondiste de inmediato: (Vie 6/4/2012 16:17):

Hola, Graciela:
Por supuesto que te puedo ayudar. Mándame los dos, el inglés y el español. No hace falta que pongas mi nombre. Eres tú quién lo ha escrito.
Saludos desde España,
Ángel

A los pocos días leí en la página de la Fundación Urantia la publicación de la foto familiar que yo había enviado con mi comentario traducido al inglés.

Por eso, como forma de agradecimiento a tu hermosa y desinteresada actitud, compré tu primera versión de traducción de Los escritos de Urantia. ¡Y mi admiración hacia tu obra fue siempre en aumento! Transcribo aquí algunos comentarios que hice:

  • Lo hago para motivar a las personas a que lean tu traducción. Para inspirarlos a que te valoren como te valoro. Para que el mundo te conozca como el brillante TRADUCTOR que ha salvado a la grandiosa revelación contenida en el libro de Urantia de la tergiversación de importantes conceptos debido a los innumerables errores de traducción realizados por la Fundación Urantia.
  • Qué interesantes las citas de la Biblia en varias páginas, desconocía que estuvieran ambos libros tan pero tan relacionados...aunque sabía que muchos católicos le encontraban parecido...qué decirte... ¡Está genial!
  • Una de las cosas que creía firmemente, era que en la Fundación había una élite de traductores insuperables, hasta que en un Foro encontré una traducción tuya sobre ciertos términos que llegaron a mi mente y abrieron mi discernimiento con una calidad mucho mayor, y fue así que empecé a leerte y a valorar tu trabajo que me permitía comprender mucho mejor la Revelación. Mira, ahora, no hago más que leer el título de este primer tomo que has traducido y cuando leo “los universos globales” esa palabrita “globales” abre mi mente a conceptos mayores como interconexión, comunicación e interdependencia entre los universos entre sí y con el universo central de una manera única. [Nota del traductor: Para mayor claridad de los antiguos lectores, cambié este término a “suprauniversos”, que incluía un mismo significado.] Ten fe, ya llegará el tiempo en que jóvenes mentes te valoren en su justa medida, porque eres un adelantado a la época.
  • No te puedo explicar con palabras lo que es abrir tu libro y encontrar el concepto “Preceptores de la Trinidad” y la explicación tan clara de lo que hacen coordinando a los seres de doble origen con los de triple origen.... Esa es la tarea de un preceptor aquí, establecer lazos de coordinación entre un grupo de seres altos y los más bajos... tal cual... Pero es un cargo de la planta funcional docente que no existe en todos lados, no sé si existe en los países de idioma inglés, pero en España no lo tienen.... ¡Qué sorpresa encontrarme con que esa es la función de estos Preceptores paradisíacos! ¡Me hace emocionar cada vez que lo leo!
  • De modo inexplicable, en un 100% acepto todas estas modificaciones que has realizado. Esos términos llegan a mi alma e impactan en ella de una manera única... No es de ahora, hace ya algunos años leí en un Foro tu trabajo y el término Salvington traducido por ti como ciudad de Salvación o lugar de Salvación y a partir de ahí todo cambió para mí. Quedo a tu disposición, adonde haya que ir a presentar y respaldar desde mi humilde posición tu obra. Tienes mi incondicional colaboración.
  • Yo no sé cómo explicarte lo que me sucede al leer tus escritos, abres surcos de firme y fuerte reflexión en mi mente y este acto no para de realizarse. Comienzo a leer y se despiertan variados pensamientos en virtud de ese modo tan expresivo que tú tienes de traducir. Tus palabras transmiten todo tu ser, invitan al estudio, al cuestionamiento, a la reflexión, al discernimiento... no dejes de hacerlo... sigue tenaz en esta magna tarea que te has impuesto... me siento tan incapaz de cambiarte una coma, un mínimo detalle a lo que escribes... sólo estoy para leerte y admirarte.
  • ¡Tu traducción es INSUPERABLE, MAGNIFICA! Es imposible de traducir en palabras de qué modo amplía el discernimiento los términos que usas, lo que provocan en la mente que lee... Espero que tú puedas ver el fruto de tu trabajo en esta primera vida y te aseguro que hago y haré todo lo posible para ello, todo lo que esté a mi alcance, e incondicionalmente, para que todos se enteren quién eres y lo que haces.

Estas fueron palabras mías en el año 2012 y desde entonces no he dejado de cumplir con lo prometido. ¡Mil gracias siempre a ti Ángel Francisco Sánchez Escobar! Dios te bendiga.

Graciela

Scroll to Top